viernes, 12 de agosto de 2011

Picaflor


La computadora está encendida.

El hombre termina de prepararse:

traje gris,

zapatos negros tan lustrados que encandilan,

chalina púrpura anudada al cuello

y pañuelo del mismo color

asomando por un bolsillo del saco.

Antes de tomar asiento, un último toque:

un poco de fragancia francesa

detrás de las orejas.

Estira sus dedos y los hace sonar.

Allá va,

de ventanita en ventanita,

va volando

el picaflor de msn.

6 comentarios:

  1. El perfume es altamente anacrónico.

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  2. Prohibirlo en todas las circunstancias, digo.
    Andaba buscando un relato que me había gustado mucho en el archivo del blog, pero no lo encontré.
    Si podés, decime cuál era el relato que me había gustado mucho y dónde está.. ja..
    taluego

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  3. ¿Será "Castigos" tal vez, Oscar Wild? http://levrerista.blogspot.com/2009/07/castigos.html?showComment=1301686171512#c1864229703435042362

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  4. No, ese fue el primero en el que comenté, al azar, porque todos me parecían muy buenos. Pero ahora me interesaba otro que recordaba vagamente.
    En fin, cuando tenga un rato sigo buscando, ya que te negás a proporcionarme la información :-)
    Además hay entrada nueva.

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