Me dijo que a mí me gustan las mujeres que no me quieren ni me van a querer, porque soy masoquista y siento placer en el dolor; que me boicoteo, y que eso es por no sé qué de la sobreprotección maternal durante un estadio crítico de la infancia. No entendí mucho; por suerte mi madre entró al consultorio y espantó a la psicóloga a escobazos.
Edípico.
ResponderEliminarEsa dicen que es la palabra.
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