Él tomó un cuchillo, trazó un círculo profundo alrededor del corazón, y se lo arrancó.
Quedó con su corazón en las manos.
Las extendió, velozmente, sin pensar, o tal vez pensaba sintiendo, y le entregó su corazón a ella.
Ella lo tuvo en sus manos; lo miró, lo observó con cuidado, lo acarició.
Él era feliz.
Ella, luego, con mucho cuidado de no dañarlo, le devolvió el corazón, imitando con sus manos la forma de un recipiente.
Él lloró. Ella lloró.
Él tomó el corazón y se lo volvió a colocar en su lugar.
Ella creyó que el corazón había sido devuelto al hombre;
jamás llegó a entender que ese corazón aun le pertenecía.
A los corazones que se regalan es imposible devolverlos.
lo que se regala no se pide - deciamos en la escuela
ResponderEliminares una version mas naif... previa al cosquilleo inguinal, pero es mas o menos lo mismo
"lo que se aprende de chico, se es de mayor" dicen por ahí, así que me sirve tu dicho escolar.
ResponderEliminarHola cómo ándás? Bueno, hoy después de mucho tiempo que me lo había propuesto me puse a leer algunos de tus textos. Igual, como demoré bastante me siento orgulloso, ajjaja.
ResponderEliminarLa verdad que lo que leí me gustó mucho. Me gustó porque generás humor pero no te quedás ahí. Por ejemplo en "la mujer de los dos corazones" tratás un tema profundo, pero lo hacés con una historia simple que incluso juega con los lugares comunes pero no se pierde en ellos. O sea, jugás con lo trágico de una manera no trágico-patética.
En cuanto al humor: primero, me cagué de la risa (sobre todo con las canciones punk). Pero no sólo, sino que veo una afinidad estética, una forma bukowskiana-levreiana absurda que a mí personalmente me gusta mucho.
No pretendo que mis comentarios sean super pomposos, ni tampoco hacerme el crítico, pero cuando algo me gusta, me gusta decirlo. Supongo que habrán cosas que criticar pero yo no las veo. Así que ta. Además, el blog está muy bien armado.
Qué pases bien, nos escribimos.
Hoski
Fa, no sabía que yo escribía todo eso que decís...jaja...muchas gracias por los elogios Hoski, y espero tenerte de nuevo por acá.
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